Dienstag, 28. Mai 2013

6. Vecindad

28 de mayo de 2013

Ser víctima de un robo no es para nadie plato de buen gusto así que, el sábado pasado, se me amargó un tanto el día al salir de casa para ir a trabajar al hospital y encontrarme con que mi bicicleta había desaparecido. Sin embargo, tan pronto como tardé en contar mi disgusto, ya me estaban ofreciendo a tres bandas nuevo medio de transporte.

En mi viejo edificio hay únicamente tres viviendas más, y es difícil cruzarse con algún vecino. La mujer del primero es la menos cara de ver y, además, como te coja por banda, es ardua tarea conseguir emprender de nuevo el camino. El marido es su clara antítesis y nuestra relación vecinal se limita a un escueto intercambio de "buenos días" o "buenas tardes" acompañado, eso sí por mi parte, siempre de una amplia sonrisa. De ahí que, el que me ofreciera su "vieja" mountainbike para sustituir a mi sustraída bicicleta de todos los días, me sorprendiera más que gratamente. Y que hoy, antes de que me hubiera pasado a verla, me cruzara por las escaleras con su mujer y ésta se deshiciera hacia mí en elogios, diciéndome lo bien que le hacía a la WG y pidiéndome el e-mail de mi arrendador para abogar en mi favor de modo que me quede en el inmueble, ni te cuento. Las interrelaciones alemanas aún siguen dejándome (para bien...) a cuadros .

Ahora sólo me queda agenciarme un buen candado...

1 Kommentar:

  1. ¡Fabuloso! No hay mal que por bien no venga :)
    Y siempre tras la oscuridad, viene un rayo de luz...
    ¡Bonne journée! y gute Fahrt!

    AntwortenLöschen